La denegación de servicios distribuidos, o más comúnmente conocidos como ataque DDoS, un tipo de actividad perpetuada por ciberdelincuentes que pueden causar mucho daño a los negocios. En InprOTech te enseñaremos cómo funcionan, sus variantes y cómo prevenirte para que no te atrapen con las defensas bajas.
Seguramente habrás escuchado más de una vez hablar sobre “ataques DDoS”, sobre todo en círculos asociados a la ciberseguridad, pero ¿qué son exactamente? Podemos decir que consisten en un ataque llevado a cabo por cibercriminales con el objetivo de colapsar un servidor redirigiendo un exceso de tráfico que no puede soportar. Esto causa que el servidor ralentice sus operaciones hasta el punto de llegar a colapsar, impidiendo al tráfico que acceda al sitio. Este tipo de ataques pueden ser muy perjudiciales para cualquier negocio online.
Los motivos que hay detrás de estos ataques pueden ser de toda clase, desde “hacktivismo” a una búsqueda intencionada de perjudicar a un negocio. El factor clave que los diferencia es la motivación que hay detrás: mientras que el malware se suele utilizar para robar o extorsionar a una víctima, los ataques DDoS se enfocan más en generar caos y desorden. Es tanto el daño que pueden ocasionar que suelen ser la comidilla cuando se hablan de los ciberataques más comunes.
¿Cómo funciona un ataque DDoS?
La mayoría de los ataques DDoS se emplean a través de “botnets”, grupos de ordenadores actuando de forma conjunta. Estos ordenadores intentan varios accesos a una misma web y de forma simultánea, abrumando al servidor y provocando que acabe cayendo.
¿Cómo se forman estas botnets? Hackeando otros ordenadores. Por lo general, un hacker se vale de malware para aprovechar las vulnerabilidades, sin parchear, de aquellos que accedan al servidor, mediante un programa de Command and Control (C2). A través de la explotación de las citadas vulnerabilidades, un hacker puede conseguir el apoyo de un gran grupo de ordenadores de una manera rápida, barata y fácil.
Una vez tengan el control de una cantidad considerable de ordenadores, los hackers construyen la botnet de manera que, a través de un solo comando, pueden lanzar a todos los ordenadores contra el servidor objetivo. Esto provocará que el servidor cese su actividad debido al intento masivo y descontrolado de accesos de ordenadores que no tenían previstos.
Aunque suene como una travesura sin mucha importancia, los ataques DDoS pueden generar pérdidas de hasta 120.000 euros en pequeños negocios y de miles de millones en grandes empresas.
Tipos más comunes de ataques DDoS
Estos ataques tienen muchas formas y nunca paran de evolucionar. A veces, incluso podemos ser víctimas sin saberlo mediante ataques silenciosos que monitorizan las vulnerabilidades de nuestros sistemas. Descubrirlos a tiempo es la mejor forma de poder combatirlos. Antes de que empiecen a ocasionar pérdidas en tu negocio.
Ataques DDoS más conocidos:
- Ataques de capa de aplicación: o también conocidos como Ataques de Capa 7, consisten en un intento de fatigar los servicios de una web consumiendo todo su ancho de banda. Cuando un hacker envía un montón de solicitudes desde varios ordenadores a la vez, el servidor objetivo al no poder manejar todas las solicitudes termina colapsando y dejando de responder. Las peticiones se envían de manera retroactiva, es decir, cada ordenador refresca su intento de acceso de manera regular.
- Ataques de protocolo: estamos ante una variante que intenta agotar la capacidad informática de diversos recursos de una red, como servidores o firewalls, enviando peticiones de conexión desde diferentes dispositivos. A diferencia de la anterior, en este tipo de ataque se trata de generar solicitudes de conexión malintencionadas que vulneran las comunicaciones del protocolo.
- Ataques volumétricos: consisten en ataques de sobrecarga de una red con grandes cantidades de tráfico saturando el ancho de banda del objetivo. El ataque es llevado a cabo por bots que envían tráfico al objetivo hasta que colapse. Existen una serie de vectores volumétricos que los ciberdelincuentes utilizan para sus ataques, por ejemplo, técnicas de ataque de reflexión y amplificación para sobrecargar una red u objetivo.
En función del tipo de ataque DDoS, algunos son más difíciles de detectar, mientras que otros presentan un reto más complicado a la hora de defendernos.
Cómo prevenir un ataque DDoS
Si te encuentras en medio de un ataque DDoS, el tiempo es el recurso más valioso. La mejor prevención es la monitorización constante de tus recursos, seguido de un sistema eficiente de alerta que funcione con notificaciones en tiempo real. Si un ataque DDoS estalla en tu servidor, tienes que ser capaz de frenarlo a tiempo y rápido. Puedes bloquear las direcciones IP de los ordenadores atacantes mediante tu firewall o aislar el sistema que esté bajo ataque.
Si el ataque todavía no ha comenzado y quieres blindarte, sigue los consejos que te daremos a continuación:
Desarrollar un plan de respuesta
Puede que suene a tontería, pero la prevención empieza con un buen plan de respuesta. Para ello, necesitamos elaborar el plan paso a paso. No podemos responder a un ataque DDoS en el momento, por lo que tener un plan bien enfocado será el método ideal para prevenir cualquier daño que pueda sufrir nuestro negocio.
- Monitoriza tus sistemas: Todos, no pases ninguno por alto. Cualquier dispositivo conectado a la red es susceptible de ser atacado. Elabora una lista de todos los dispositivos vulnerables a un ataque DDoS. Cuando recibas una alerta, podrás consultarla para localizar rápidamente el dispositivo afectado, aislándolo del tráfico y salvando a los demás sistemas de sufrir daños colaterales.
- Crea un equipo de respuesta con órdenes claras: Un ataque no es un asunto sujeto a debate, es un problema que debe ser atajado de la forma más eficiente. Mantén los roles y las responsabilidades claras a tu equipo para que responda con contundencia en caso de que se produzca o se detecte un ataque.
- Establece una línea de comunicación de emergencia: Es esencial saber a quién avisar y cuándo. Tus clientes y tus proveedores deben saber si estás bajo ataque para que puedan responder de manera responsable y mitigar los daños.
Esto es lo que tienes que hacer en caso de haber estado bajo ataque, pero ¿qué podemos hacer para defendernos antes de que ocurra?
Mantén tus equipos actualizados
Esto es crucial, tanto si hablamos de ataques DDoS como si se trata de cualquier otro asunto de ciberseguridad. No sirve de nada intentar plantar cara a un ataque DDoS y pretender mitigar sus daños si tenemos versiones obsoletas y repletas de vulnerabilidades de nuestros sistemas. Tener tu servidor actualizado permite parchear sus defensas, cerrar agujeros que puedan aprovechar los hackers y reducir mucho el riesgo de que cualquier intento de ataque termine siendo un éxito.
Por ejemplo, si tu web se cimienta en WordPress, vete a la sección de actualizaciones y vigila que tanto el CMS como los plugins están actualizados a la última versión. Deshazte de los plugins que no se puedan actualizar o cuyo soporte haya expirado: son túneles que pueden servir para que los hackers accedan a tus sistemas.
Además, mantener tus equipos y software actualizados no es algo costoso ni laborioso, la mayoría de los procedimientos se reducen a un clic que pueden ayudar a prevenirte de sufrir pérdidas millonarias.
Realiza prácticas de seguridad online básica
No hay mucho que comentar aquí. Cosas como utilizar contraseñas fuertes (y mantenerlas actualizadas de manera regular), tener activo el firewall o actualizados los servicios de tu antivirus pueden ayudar a prevenirte de ciberataques más de lo que crees.